See You Again {Dianna}

Lo sabía. Aún con el silencio incomodando sus oídos se esperaba que la respuesta fuera la obvia. Su nación era esa, y toda persona lejos de casa se siente incómoda. Hasta Dianna que había tenido que viajar por obligación un par de veces fuera de EE.UU ya esperaba con ansias estar en su habitación y rodeada de gente que le conociera bien. Pero aún así, esa no era razón para excusar de el por qué Tom se iría. Ella no quería que se fuera, pero tampoco lo demostraba o se molestaba en mandarle indirectas respecto a aquello.
Muchas veces pensaba que el dejar a un lado el orgullo sería lo mejor. Era una carrera de mente versus cuerpo pero a la vez, podía dar razones obvias de que su amistad se rompería con la lejanía y que los medios y redes sociales no serían lo mismo que en persona... Pero... ¿Cuantos amigos no tenía Dianna, lejos?. Todo se había conservado intacto, ¿Por qué con él sería distinto?. Y ahí está la razón por la cual parece jamás le dará un no a Felton y es que por más que intente borrarlo de sus pensamientos sabe que en su interior se esconde la verdad. Esa verdad de la cual está enterada pero no sabe admitir.

La risa de él le desconcentra por un segundo en el que vuelve la vista algo preocupada. ¿Qué le había causado gracia? Ella enserio está en un drama emocional - exagerando un tanto la frase - si él enserio llega a desaparecer de un día para otro. ¿Podría soportar, Dianna no verle? ¿Excusas?. Excusas eran las que pedía él para quedarse. Su mirada se iluminó por un segundo, un atisbo de felicidad se podía notar ahí por lo que en un abrir y cerrar de ojos quitó su mirada de la de él para que no se diera cuenta. - Pues... no sé - susurró fijándose en algún punto fuera de el ventanal. ¿Por qué no solo le decía que lo que quería era que se quedara ahí, con ella, sin más excusas?. Todo era siempre tan complicado para Agron.

Aún así dejó que el silencio consumiera su distancia por poco más de un minuto. No tenía nada que decirle por que si hablaba estaría mintiendo de una u otra forma, o eso pensaba. Para cuando llegó el mesero con los pedidos pudo jurar que notó la incomodidad de la situación ahí, por lo que sin decir nada se fue posicionando con rapidez los productos sobre la mesa. Ágil, la rubia tomó su taza y le dió un par de sorbos; el simple no sé no era una gran respuesta, lo sabía, pero si seguía hablando tendría que preparar bien sus palabras. Con desdén cargó su rostro sobre el frío ventanal a su lado atreviéndose por fin a mirarle. - No quiero que te vayas - susurró - No tengo idea de que razones darte para que te quedes pero; simplemente no quiero y... pfft, sé que algún día tendrás que hacerlo, pero, ¿Tan pronto?. Digo... - ¿Digo?. Con que seguiría ahora era una duda en su cabeza. Sus ojos se tornaron indecisos y se notaba el nerviosismo cuando hablaba pero era algo lo que causaba ¿no?. - Si te vas me voy contigo - bromeó por fin asomándose una sonrisa en la comisura de sus labios. - y no creo que te animes a arruinar un TvShow como Glee sin su Quinn Fabray - agregó encogiéndose de hombros.

La risa era algo que sumaba días a tu vida y a la vez alegraba ésta misma, eso era algo que Dianna lo tenía bien claro desde un principio, pero no por esa misma razón se trataría de que estuviera decididamente feliz o emocionada por un punto específico. Nadie nunca le quitaba la sonrisa de el rostro a menos que fuera extremadamente difícil la 'situación', pero en éste momento era cuando enserio se demostraba ese extraño y sofocante cariño que estaba comenzando por tener la rubia hacía el villano de las películas. No podía creerse aún que sus palabras fueran las que ayudaran a la decisión de permanecer sobre la tierra Americana. ¿Enserio Agron llegaba a influir en aquello?. Que pensar de aquello ahora mismo era un dilema. Las esperanzas y los atisbos de oportunidades entre ellos era algo que ella no quería experimentar torturándose a si misma de manera cortante.

¡Claro que sonaba bien! ¿Cómo podía no hacerlo? Y si bien un mes era bastante corto para los cálculos de la chica era posible que en ese mismo instante estuviera con planes recalcados de salidas por día, aunque mucho menos era su idea sofocar al muchacho con tanta presencia de ella a ver si se cansaba. Aunque, quizá de algo serviría en el echo de que tanta salida le sirviera a ella para dejarle ir de una vez por el cansancio de su presencia. ¿Por qué no solo dejaba irle?. Su familia y amigos le esperaba y este era un lugar en dónde los Ingleses demoraban en acostumbrar a menos que vinieran con frecuencia y por lo tanto, el era uno de ellos, pero aquello no le excusaba de que no se aburriera. Ni ella misma habría durado tanto tiempo en un lugar, ajeno, repite. Y eso que él hacía, era un esfuerzo. O eso suponía ella. Un mes. Solo un mes bastaba para convertir de aquella amistad en algo inolvidable. Si, eso era lo que ella ansiaba conseguir por más que se lo negara. - Veamos cuanto duramos uno con otro tanto tiempo aquí, si llegamos al mes, será un milagro. - bromeó risueña Dianna, y es que era una mentira. Sabía que podía pasar día y noche, el resto de su vida junto a él y no se aburriría jamás de conversar de cualquier cosa que se les ocurriera.

Ahora, su invitación, auto - invitación (A aclarar) a la premiere era algo que la muchacha no había pensado momentos antes, ¡era cierto! Se venía el estreno y última temporada en la que apareciera ella de la serie con más fuerza musical dentro de la Tv. Esa serie que le había dado todo lo que tenía ahora y a la que amaba por sobre muchas cosas, ¿Soportaría sin esta?. Una gran pregunta con una definitiva respuesta de un no a medida al menos de que pasara el tiempo. Le sorprendió que fuera él quien se tomara la molestia de recordarlo. - E-eh... ¿Estás bromeando, no? - interrogó con un ligero gesto de espanto en su rostro ya que; a decir verdades suponía que sería él, el primero en dar por finalizada las salidas en público. - ¿Te das cuenta de que estamos entre medio de el ojo de mucho público y si seguimos apareciendo así por las premiere los cotilleos serán insoportables? - Era cierto. Tan insoportable pero que cada vez que Di' los leía una sonrisa de costado se aparecía por su rostro. Imaginárselo era bueno. Pero no era agradable que todos se lo imaginaran, las esperanzas jamás eran buenas.

Intentando rodar los ojos, por que en realidad la idea le agradaba y no tenía a nadie más con quien asistir hasta el momento, tomó su taza dándole otro largo sorbo. ¿Qué hora sería?. Suponía que no había pasado mucho tiempo desde que había llegado pero una idea se asomó por su cabeza que le hizo reír por acto reflejo solo suponiéndolo. Al momento paró, estaba pensando sola y no compartía, pero llegaba rápido a la conclusión que no sería tan mala idea. Después de todo, su extendida estadía en el lugar la tomarían como porción de acusar a Agron por eso. - ¿Y si te doy otra buena razón para que te quedes? Supe que te gustaba cantar... - susurró encogiéndose de hombros mirándole de reojo.

Tenía razón. Quizá Dianna estaba exagerando un tanto el soportar y el tiempo que se quedaría, pero el creer que la razón de su estadía aún dependiera de su opinión le obstruía la mente y le hacía pensar cada estupidez que se imaginaba una adolescente en su posición. A veces, en segundos se pregunta si acaso realmente valdrá la pena ese tiempo, quizá, como siempre hay una opción para todo, la relación podría empeorar o cambiar rotundamente y es que la negatividad era algo que tenía en la frente ella, aunque lo negara y casi nadie lo notara en si misma circulaban miles de ideas. Opciones. Ajetreadoras. Aunque pensándolo mejor; la cabida al pensar solo empeoraban las cosas, solo hacía que la parte inmadura de la rubia flotaran y lo único que debía hacer era mirarle. Es decir. A veces solo bastaba una sonrisa para olvidar todos los problemas y él tenía ese efecto sobre ella. Afortunadamente.

Ahora. ¿Podría soportarlo enserio?. ¿Se trataba tan así de un tema para soportar?. En el caso de ella los datos de revistas y sub escritos con suposiciones era algo que le divertía de sobre manera pero que sabía podía incomodarlo a él como a su pasado. Sabía que ya no de hace mucho venía saliendo de algo y bueno, son cosas del pasado que torturan a las personas externas, y si bien les agradaba se suponía que en el dividido mundo de la fama tenías que cuidar tu apariencia como tus palabras por que no todo dependía solo de los sentimientos y lo que uno quisiera. El otro también era para perjudicar, al otro también se le perjudicaba. Pero a él no parecía importarle. Más bien desviaba el tema con un simple comentario que era obvio. Si, podía ser peor, lo sabía, algunas veces se inventaban tales catástrofes de las personas que la fama les arruinaba la vida de manera irremediable y es por eso mismo que a la rubia no le gustaba incrementarse mucho en el tema ni indagar mucho para conseguir más popularidad. Hacía lo que a ella le gustaba, pero encontraba que el echo de tener cámara no valía la pena cuando te dabas cuenta que podía dar por finalizada tu noción y cordura. Tantos casos. Dianna solo alcanzó a encogerse de hombros con ligereza y dar a cuentas de que lo que decía era cierto y no buscar un mensaje bajo eso. ¿Por qué siempre debía de andar buscando significados escondidos?. Era una insistente acción por parte de ella, la cuál necesitaba controlar.

Con ojos confusos bajó la mirada. ¿Por qué todo parecía ser tan difícil?. O... ¿Por qué ella tenía que complicarlo?. No perdía nada con decírselo, pero aún así tenía el miedo. El insoportable miedo que le carcomía las neuronas.

Pero contorneando el tema y saliendo de éste. ¿Cómo sería?. Tener a una estrella de Harry Potter sería fascinante, al menos en uno que otro capítulo de especial, por que a la vez, se sabía que no era el único que le gustaba el tema de la música, ni cantar. Habían otros, probando suerte se conseguiría a el villano de la saga. Después de todo, siguiendo este tipo de taquilla se informaba de los actores de ésta cinta y bueno, también estaba en los gustos de él por lo que las fan's tenían claro la voz de Tom era tan buena como las otras. No se lo habría imaginado antes sinceramente, pero cuando las oportunidades venían aprovecharlas eran lo óptimo. ¿Modestia? Posiblemente, pero le causó risa su comentario. No se molestó en ocultarla por que Dianna no se sentía con la gran voz sinceramente, era algo que encontraba muy diminuto para estar en el programa, extrañamente combinaba con sus relaciones y su trama, así que definitivamente había un tanto de estilo en esa marca. Ahora, intentando visualizar a Tom dentro de la serie era realmente atrayente. ¿Romances?. ¿Con ella?. Rogaba. - Alá. ¡Sabes que no!. Cantas hermoso. - comentó en un tono divertido tragando el último sorbo de el café y pensándolo por un buen rato se atrevió a quitar una galleta de la mesa. ¿Que tan mal le sentaría?. Cada vez que comía parecía enfermarse y no era un problema psicológico. Más bien, su estomago estaba funcionando mal desde hace un tiempo. Mascó de ésta y espero a que se disolviera en sus labios para reincorporarse y seguir hablando.

-Yo creo que sería fenomenal que aparecieras en la serie, digo, sé que deseas trabajar conmigo - alzando su mentón y con el tono totalmente egocéntrico salió de sus labios aquella frase convencida. Al menos ella quería. ¿No sería divertido acaso?. Aunque en un principio no era más que una broma ahora estaba convencida de que iba a funcionar, no se sacaría esa idea de la cabeza por un buen rato, pero insistiría, lo suficiente hasta sacar un sí rotundo de él. Sus ojos volvieron a ascender y le observaron por unos segundos con ternura. -Oh... vamos...podrás conocer a Darren. podrías pasar otro poco acá y no serán tiempo entre cortados por que estoy en el set, si no que estarías ahí. Conmigo. - Si. Con ella. No permitiría que se lo quitaran ya que... bueno, solo era un mes y luego de eso verle; verle se haría más complicado. Posiblemente un par de años, exagerando a lo mucho, pero con la realidad delante. Quizá cuando volvieran a verse todo sería lo distinto y las mismas oportunidades de iniciar algo, ese algo ansiado, por ella. Ya no estarían.